Justo en el día de su cumpleaños número 48, Shakira hizo un regreso triunfal a los GRAMMYs, deslumbrando en la alfombra roja con un espectacular atuendo que resaltaba su imponente presencia. La noche marcó un hito en su carrera, ya que, después de 18 años de ausencia en estos premios, la artista colombiana volvió a subirse al escenario para recibir el galardón al Mejor Álbum de Pop Latino por Las Mujeres Ya No Lloran. Su última aparición en la premiación había sido en 2007, cuando presentó su icónico éxito Hips Don’t Lie.
Con la emoción reflejada en su rostro, Shakira recibió el premio de manos de Jennifer Lopez y, al tomar el micrófono, dedicó palabras llenas de gratitud y orgullo. En un discurso que tocó corazones, la barranquillera aprovechó el momento para enviar un mensaje poderoso a la comunidad migrante en Estados Unidos, a las mujeres que luchan diariamente por sus familias y, por supuesto, a sus dos hijos, Milan y Sasha, quienes la acompañaron en esta noche especial.
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«Esto es increíble, muchas gracias«, expresó conmovida al recibir el gramófono dorado. «Quiero dedicar este premio a mis hermanos y hermanas migrantes en este país. Ustedes son amados, son valiosos y siempre lucharé con ustedes. También a todas esas mujeres que se esfuerzan cada día para sacar adelante a sus familias: son unas joyas». Sus palabras resonaron con fuerza en la audiencia, reafirmando su compromiso con quienes enfrentan adversidades en busca de un futuro mejor.
Shakira le dedica su Grammy a sus hermanos y hermanas inmigrantes en Estados Unidos, las mujeres que lideran familias y a sus hijos 🥹#Grammys pic.twitter.com/l3ESJhubFv
— MUSICTRENDS Colombia (@musictrendscol) February 3, 2025
La segunda parte de su mensaje estuvo cargada de amor maternal. Con la voz entrecortada, Shakira miró a sus hijos, quienes desde su asiento la observaban con admiración. «Quiero compartir este premio con Milan y Sasha. Estoy tan orgullosa de ustedes por ser tan buenos conmigo, por apoyarme como lo hacen. Los amo», declaró con ternura, sellando así una noche inolvidable no solo para su carrera, sino también para su vida personal.
Este regreso a los GRAMMYs no solo fue una celebración de su música, sino también un testimonio de su evolución como artista y madre, dejando claro que, aunque los años pasen, su talento y esencia siguen brillando con la misma intensidad.