«En un esfuerzo por reforzar el control migratorio, legisladores de los estados de Misuri y Mississippi han propuesto proyectos de ley que permiten recompensar con hasta 1,000 dólares a quienes proporcionen información sobre migrantes sin estatus legal».
El plan tiene como objetivo incentivar la vigilancia comunitaria y facilitar la denuncia de posibles migrantes sin autorización. Sin embargo, las organizaciones defensoras de derechos humanos alertan sobre el riesgo de discriminación y perfiles raciales, ya que las personas encargadas de ejecutar estas medidas no contarían con formación policial, lo que podría derivar en abusos.
Además de estas iniciativas, otros estados como Oklahoma y Tennessee están impulsando leyes que refuerzan las restricciones migratorias, incluyendo verificaciones del estatus migratorio en escuelas y la implementación de tarifas para niños indocumentados. A su vez, Florida avanza en una propuesta para acelerar las deportaciones a través de la creación de un departamento especializado en inmigración.