Higüey.-.Israel Bautista Romero, mejor conocido como El Gata, de 39 años, estaba detenido en la cárcel preventiva de Higüey, supuestamente falleció debido a los golpes que recibió de sus compañeros, porque este no tenía dinero para pagar algunas exigencias que se le hacia.
Las autoridades aseguran que el detenido falleció de tuberculosis,pero las fotos obtenidas por este medio demuestran lo contrario, donde se puede evidenciar los hematomas que presenta el cuerpo, en los gluteos, brazos y piernas y otras extremidades.
Según un testigos, al occiso le habrían fracturado varias costillas la semana pasada y producto de esto duro tres días ingresado en el Hospital de esta ciudad.
El cadáver Bautista Romero (El Gata) fue enviado al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) en San Pedro de Macorís, para las experticias de ley.
Hay que recordar que en esta cárcel no es la primera vez que este tipo de situaciones acontecen en las propias narices de las autoridades pertinentes, han sido varios los internos que han perdido la vida a golpes, o por enfermedades que han obtenido luego de ser detenidos.
Antecedentes
El pasado año 2019,el turista sueco Joan Silva, de 46 años, habría falleció en el destacamento policial del por los golpes que alegadamente recibió por los presos de la cárcel preventiva de esta ciudad, en donde estuvo detenido, pero lo mas extraño del caso es que un velo de misterio cubrió este hecho y las autoridades no se pronunciaron al respecto.
De igual forma, el seis de de junio,de la citada fecha falleció Frank Mora Morillo, de 50 años. El hombre estaba hospitalizado desde el 28 de mayo en el Hospital Nuestra Señora de La Altagracia, donde murió debido a los golpes que recibió en la cabeza.
El informe policial no aclaró en qué circunstancia falleció el hombre que guardaba prisión desde el 18 de febrero del 2019 por haber golpeado a su mujer.
El pasado mes de julio de este año,Franklin Thomás Guerrero,detenido en el citado penal, también falleció , presuntamente por ahorcamiento luego de sostener una riña con otro reo.
La cárcel preventiva, quien forma parte del viejo modelo de reclusorios de la Procuraduría General de la República, ha sido definida como una “fábrica de muertos”, “una bomba de tiempo” y “un dolor de cabeza” para la población y entes sociales de Higüey.
Familiares de los internos han denunciado en varias ocasiones que son maltratados por los prebostes, en combinación con la seguridad del recinto penitenciario para quitarles dinero.
