«El «hoy no, mañana lo hago» y así nos llega diciembre. Esto es un mal que nos está afectando y no nos damos cuenta. La procrastinación no es más que retrasar alguna actividad o, más bien, sustituirla por otra más irrelevante por miedo a enfrentar o afrontar dicha actividad, que sabemos que merece un esfuerzo extra de nuestra parte».
Por: Lisselot Pons Sánchez
Creo que este mal nos está arropando y no nos damos cuenta, pues nos hemos acostumbrado de una manera increíble a la llamada zona de confort, donde simplemente nos hemos acomodado y, por lo general, no queremos salir. ¿Sabías que el más afectado por procrastinar eres tú? ¿Sabías que en algún momento de tu vida chocarás con esa inmensa pared que construiste con tus propias manos para no dejarte avanzar?
¿Qué causa que procrastinemos tanto?
- Miedo al fracaso.
- Falta de motivación.
- Creer que todo debe hacerse rápido y que debemos salir corriendo de todo, cuando no debe ser así.
¿Y qué pudiera causarte procrastinar tanto?
- Sentimiento de culpa o incompetencia.
- Ansiedad, preocupación o temor.
- Estrés, baja autoestima.
Si eres de los que dicen mucho: «Hoy no, mañana sí», «Lo hago ahora», «Dame hasta mañana» y el mañana nunca llega, es una señal de alerta. Eres uno de esos.
Te regalo algunos tips que pueden ayudarte a reducir la procrastinación:
- Organiza tus días. Esto no es tan difícil como crees, solo es cuestión de tomar el tiempo y enfocar tus metas.
- Realiza pequeñas tareas, pero sé constante. (Te invito a que, durante toda esta semana, te propongas arreglar tu cama cada día. Si ya lo haces, identifica una pequeña tarea que puedas agregar a tu rutina diaria).
- Establece metas para terminar las cosas y prémiate por tus logros.
Entonces, agarra ese libro y termínalo. Justo es que tienes muchos meses en los que solo leíste el prólogo. Inicia a hacer ejercicio como prometiste en tu lista de cosas nuevas para este año. Haz eso que está en tu lista de pendientes, y no te imaginas la sensación tan gratificante que es colocar «REALIZADO» a una tarea pendiente de mucho tiempo.
¡Vamos, que sé que puedes!
«Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres; sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís.»
Colosenses 3:23-24
