«Las calles del país han sido testigos de accidentes devastadores que han sacudido a la sociedad. Ante el aumento de la siniestralidad vial, surge la necesidad de medidas más drásticas que frenen la imprudencia y garanticen un verdadero régimen de consecuencias».
SANTO DOMINGO. – El director ejecutivo del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant), Milton Morrison, presentó un conjunto de modificaciones a la Ley 63-17 con el fin de endurecer las sanciones contra infractores y mejorar la seguridad vial. Estas propuestas fueron entregadas a la Consultoría Jurídica del Poder Ejecutivo en respuesta a la creciente preocupación ciudadana y el debate nacional sobre los accidentes de tránsito. Entre los cambios planteados se encuentra la declaración de rebeldía para conductores que no paguen multas, la retención de vehículos mal estacionados o manejados bajo los efectos del alcohol, y el aumento en la fiscalización del transporte de carga. También se propone reducir los límites de velocidad, reforzar los operativos de pruebas de alcoholímetro y establecer penas de cárcel de hasta dos años para quienes participen en carreras clandestinas.
Las recientes tragedias, como la muerte de Aida Nicole y el accidente en Las Yayas de Azua, han puesto en evidencia la urgencia de aplicar sanciones más severas. Con estas reformas, se busca frenar la impunidad en las carreteras y reducir el alto número de víctimas en el país.
