«El cielo sigue siendo un espectáculo, solo que ahora empieza más tarde y termina antes.”
PUNTA CANA. RD – Quienes viajen al paraíso turístico durante noviembre notarán una sutil metamorfosis en el reloj natural del Caribe. El sol, fiel protagonista de la región, comenzará a mostrarse cada vez más tarde y a despedirse antes, reduciendo los días a poco más de 11 horas de luz.
Desde el 1 hasta el 30 de noviembre, el amanecer se retrasa 16 minutos y el atardecer se adelanta 13, dando paso a noches más largas pero igual de cálidas.
Aun así, la esencia tropical permanece intacta. Los amaneceres entre el 10 y el 20 de noviembre son ideales para los madrugadores, mientras los atardeceres bañan de tonos dorados las playas de Bávaro, Arena Gorda y Uvero Alto.

Es el preludio visual de la temporada más fresca del año, donde la luz —aunque más breve— sigue siendo el alma del Caribe.



