«En su último discurso como presidente, Joe Biden se comprometió a garantizar una «transición pacífica y ordenada» del poder a Donald Trump, quien venció a la vicepresidenta Kamala Harris en las recientes elecciones».
WASHINGTON DC, EE.UU.- Durante su intervención en la Rosaleda de la Casa Blanca, Biden tranquilizó a los demócratas, asegurando que «Estados Unidos va a estar bien», a pesar del resultado electoral.
El presidente saliente expresó que su administración cumpliría con el mandato constitucional de una transición sin conflictos. A pesar de la derrota, Biden mostró un tono sereno y positivo, remarcando que el proceso democrático sigue siendo fuerte. Aunque no confirmó su presencia en la investidura de Trump, prevista para el 20 de enero de 2025, dejó claro que cumpliría con sus responsabilidades constitucionales y que el proceso de traspaso de poder sería fluido y respetuoso.
La promesa de una transición pacífica es significativa, dado que, cuando Trump perdió en 2020, fue el primer presidente en 150 años en no asistir a la ceremonia de toma de posesión de su sucesor. Biden, al contrario, busca marcar una diferencia al comprometerse con el respeto institucional y la estabilidad política en un momento crucial para la nación.
