«El «desinteresado» comunicador que ha estado llamado a las masas de Verón Punta Cana contra la tarifa de una empresa eléctrica en el Este, es el dueño del 25% de Rensa Punta Cana S.R.L, y director comercial de la compañía, una empresa que vende paneles solares».
Bávaro, Punta Cana. RD. – El conocido comunicador Sergio Carlo, cuyo verdadero nombre es Sergio Nicolás de Jesús Carlo Pichardo, se ha convertido en accionista de Rensa Punta Cana S.R.L. Esta empresa tiene tres socios, siendo Sergio Carlo uno de ellos con una participación de 25%, equivalente a 250 cuotas y votos.
En Rensa Punta Cana S.R.L, Sergio Carlo ocupa el cargo de director comercial. Su responsabilidad es supervisar la comercialización de productos y servicios, así como la promoción y concreción de proyectos, siempre bajo los estándares aprobados por el Consejo de Gerencia. Además, representa a la empresa en asuntos comerciales.
Un acta suscrita el 4 de agosto de 2023 por el consejo de la empresa, registra el ingreso de Sergio Carlo y otros accionistas a Rensa Punta Cana, S.R.L, empresa que se dedica a la instalación de paneles solares. Esta compañía también tiene como socios a Carlos Janáriz Iribarren y Eugenio Fajardo García.
Desde hace unos meses, desarrollan una campaña contra la empresa que suple electricidad en Punta Cana, Bávaro y otras zonas turísticas dentro de un área de concesión.
Sergio Carlo también se ha sumado a la campaña que ejecuta desde su canal youtube, sus redes sociales y el programa radial 12 y 2.
Sergio Carlo, quien anteriormente residía en Atlanta, Estados Unidos, ahora vive en Ciudad La Palma, Punta Cana. Desde allí, gestiona su popular plataforma audiovisual «Anti Noti», que cuenta con 532 mil suscriptores al momento de redactar esta noticia.
Recientemente, Carlo inició una campaña en su canal buscando una “reclamación colectiva” contra la citada empresa, con el objetivo de sumar usuarios en oposición a las tarifas de la compañía, que se originan y funcionan en un mercado regulado.
Además, según se desprende de sus comentarios públicos, incita a replicar en la zona Este, prácticas de otras empresas eléctricas del país, que operan con largos apagones, mala calidad del servicio y una alta inversión del Estado en subsidios.
Si bien es cierto que Sergio Carlo, como cualquier ciudadano, tiene el derecho y la facultad de emprender cualquier iniciativa comercial lícita y de expresar sus opiniones libremente, el dilema radica en que el productor del «Anti Noti» no ha transparentado ante su audiencia, desde el inicio, sus intereses comerciales.
Mientras tanto, alienta a su público a posicionarse contra una empresa eléctrica, dando la impresión de defender el interés general, cuando, en realidad, podría tener una motivación personal y comercial.
