El presidente electo de Bolivia, Rodrigo Paz, informó este lunes que su gobierno iniciará el restablecimiento de los lazos diplomáticos con Estados Unidos, interrumpidos desde 2008, como parte de un giro estratégico hacia la cooperación internacional para enfrentar la crisis petrolera y energética que atraviesa el país.
Paz precisó que ya ha entablado contactos con autoridades estadounidenses y naciones regionales para garantizar el suministro de combustibles y dinamizar el comercio bilateral, marcando así un cambio de rumbo exterior tras más de una década de aislamiento diplomático bajo los gobiernos del Movimiento al Socialismo.
Este anuncio representa un punto de inflexión en la política exterior boliviana y plantea desafíos internos clave sobre quién marca la agenda diplomática y qué precio pagará el país por volver al escenario global.