Por: Genesis Lara
“El filme supera las tres horas de duración y apuesta nuevamente por el formato 3D.”
PUNTA CANA, RD – La esperada tercera entrega de la saga Avatar: Fuego y Cenizas, dirigida por James Cameron, ya se exhibe en las salas de cine de Punta Cana, generando expectativa entre los fanáticos de Pandora, pero también críticas por su extensa duración y una historia que muchos consideran reiterativa.
La película retoma el conflicto de Jake Sully y Neytiri, interpretados por Sam Worthington y Zoe Saldaña, ahora marcados por la pérdida de su hijo y enfrentados a un nuevo clan Na’vi, el Pueblo de las Cenizas, liderado por una villana volcánica que se alía con los humanos comandados nuevamente por el coronel Quaritch, encarnado por Stephen Lang.

En el apartado actoral, destacan las interpretaciones con captura de movimiento de Worthington, Saldaña, Sigourney Weaver y Lang, que aportan solidez a un relato que, para algunos críticos, evidencia signos de desgaste de la franquicia.

Con su llegada a Punta Cana, Avatar: Fuego y Cenizas se convierte en uno de los grandes estrenos del momento: una experiencia visual imponente que promete atraer público, aunque deja abierto el debate sobre si la saga aún tiene fuego narrativo o si empieza a consumirse entre cenizas.



